Nuestra Naturaleza

Innumerables atractivos naturales conforman la Comarca Tajo Salor Almonte con especies de avifauna muy destacadas, como la cigüeña blanca, obteniendo así Malpartida de Cáceres el título de  Pueblo Europeo de la Cigüeña, ya que la colonia de cigüeñas blancas existentes, es una de las más importantes de la Península y de Europa,  tanto por el número de individuos de esta especie que anidan en el municipio como por la singularidad de la superficie nidificante que presentan los altos bolos graníticos del Monumento Natural de los Barruecos, declarado Mejor Rincón de España en 2015 y escenario de la serie televisiva Juego de Tronos.

Las grullas también están muy presentes en humedales del territorio como el Embalse de Brozas y Embalse de Talaván, declarados Zona Especial de Protección de Aves (ZEPA), donde el descanso de la grulla en las aguas del pantano, se convierte en un auténtico espectáculo. Llegan huyendo del gélido invierno de los países nórdicos buscando la riqueza paisajística del entorno, fijándose como habitantes  durante los meses otoñales. Existen zonas habilitadas para la observación ornitológica.

El cernícalo primilla sobrevuela también las localidades de Garrovillas de Alconétar y de Brozas donde encuentra comida y cobijo, convirtiéndose así en un atractivo para los visitantes y mereciéndose la declaración de ZEPA Urbana Colonias Cernícalo Primilla de Brozas y ZEPA Urbana Colonias Cernícalo Primilla de Garrovillas de Alconétar.

Su importancia ornitológica ha hecho posible que este territorio forme parte del Club de producto Birding Extremadura y Urban Birding Extremadura, pudiendo contemplar sus amantes también especies como cigüeña negra, milano real y negro, buitre leonado, buitre negro, águila real, águila culebrera y águila pescadora, entre otras.

Tierra fronteriza con Portugal, presume de poder tener un Parque Natural como es el Tajo Internacional, declarado Reserva de la Biosfera y compartido con el país portugués, siendo un lugar propicio para el disfrute de la naturaleza y la observación de estrellas. A él se unen espacios protegidos como el bosque de pinares de pino piñonero de Garrovillas de Alconétar, declarado Zona Especial de Protección de Aves (ZEPA), embalses en perfecto estado que ayudan a conservar los ecosistemas y mantener los usos y aprovechamientos tradicionales, como los Embalses de Arce de Abajo (ZEC) y de Arriba en Brozas, Embalse de Alcántara (ZEPA),  Embalse de Vegas Altas (ZEPA) entre Brozas y Navas del Madroño, Embalse de Petit I y de Lancho, ambos ZEC y el Embalse Molano en Arroyo de la Luz, Embalse de la Laguna de Mata de Alcántara o charcas como Charca de Brozas y Egido en Brozas, declarada Parque Periurbano de Conservación y Ocio, la Charca grande y la Charca chica  de Arroyo de la Luz, la Charca de Cueto y la Laguna de Mata de Alcántara o la Charca y Lavadero de Cueto en Villa del Rey, además de un sinfín de cordeles y veredas, destacando el paso de la Cañada Soriana Occidental por la localidad de Casar de Cáceres.  Caminos para la práctica del cicloturismo, o parajes de insólita belleza como la Ribera del Araya, Río Salor (ZEC) y Llanos de Brozas (ZEC), los Riberos del Almonte y los Llanos de Alcántara y Brozas, ambos declarados zonas ZEPA o la Cantera del Cabezo en la localidad de Alcántara, un hermoso lago idóneo para el baño con agua de manantial que ocupa el lugar de la antigua cantera que se utilizó para la construcción del Salto José María de Oriol y en la que el desnivel llega hasta los 100 metros, el espectacular Mirador El Balcón del Mundo en Alcántara, o la Peña Buraca (BIC) entre Piedras Albas y Alcántara, conocida como el “Canchal de los dos ojos”, se trata de un santuario rupestre de época prehistórica excavado en la piedra de un bolo granítico. Y otros tantos recursos acuáticos como los Molinos de Cabra de Villa del Rey (Lugar de Interés Etnográfico), el Molino del Cubo de Santiago del Campo o el Molino del Cabril de Monroy y fuentes de agua como Fuente de la Breña en Talaván, Fuente de las Amapolas de Monroy o la Nacivera de Navas del Madroño. En plena Sierra de San Pedro, Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Zona de Interés Regional (ZIR), durante el mes de septiembre y octubre, surge un auténtico espectáculo de sonidos de animales como es la “berrea” del ciervo, considerándose así este entorno natural, como un espacio relevante para la práctica de la actividad cinegética. Además,  Garrovillas de Alconétar en pleno mes de febrero muestra la belleza de un paisaje muy singular con la floración del almendro.